“El enfoque holístico de la naturopatía”, con Carlos Payá, osteópata, y Carmen Giménez, esteticista

Aunque nuestro moderno sistema sanitario está muy desarrollado, todavía perviven en todas las culturas, desde tiempos inmemoriales, distintas prácticas de “medicinas alternativas” asociadas a la utilización de la farmacopea natural y la consideración de la enfermedad como manifestación de un desequilibrio interno del uso y funcionamiento de los órganos que conforman al individuo. En eso se basa el enfoque holístico de la enfermedad, que caracteriza a la medicina natural, a diferencia de la medicina convencional o alopática, que trata puntualmente las manifestaciones de la enfermedad mediante fármacos de síntesis que nada tienen que ver con los elementos de la naturaleza con los que ha convivido el ser humano en toda su historia.

Los gerentes del Centro Algaira de Requena -donde se imparten tratamientos de naturopatía, dietética y belleza-, el osteópata Carlos Payá Chardí y la esteticista Carmen Giménez Díaz, nos explican en este programa que la naturopatía tiene una base científica demostrada y puesta en práctica de manera exitosa por diversos científicos de la época moderna, y que sus efectos no pueden considerarse como un simple placebo, pues es eficaz incluso con las personas que no creen en ella. Las tradiciones médicas de la antigüedad han tenido en cuenta que el ser humano no es sólo un organismo físico que se desarrolla, de manera saludable o enfermiza, en relación con los alimentos y las energías de las que puede disponer, sino que también es un ser con un cuerpo emocional y otro cuerpo mental, no perceptibles desde el punto de vista físico pero muy influyentes en el mantenimiento de la salud o el desarrollo de la enfermedad. Un desequilibrio en los cuerpos emocional o men tal provoca desequilibrios en el cuerpo físico, lo que se traduce en la aparición de la enfermedad. Una enfermedad ha de ser tratada desde sus causas profundas, no desde sus efectos. Por tanto, los tratamientos de naturopatía, que tienen en cuenta todos estos aspectos, son una importante ayuda para hacer frente a los trastornos que la medicina convencional, en su búsqueda de soluciones rápidas, no alcanza a resolver de manera definitiva.’