Gran acogida de la Ruta del Tapeo de Utiel con cientos de degustaciones ofertadas y un extraordinario ambiente festivo
Leer más
Movilización de Maquinaria Pesada para Combatir Incendio en Planta de Reciclaje de San Antonio de Requena
Leer más
AVA-ASAJA insiste en pedir ayudas urgentes a los viticultores tras sufrir las primeras heladas
Leer más

Esta medida supone un nuevo revés para Ayora en su lucha contra los impactos negativos de esta industria, contra la cual lleva luchando años

Ayora (27/01/2022)- Laura Sánchez Benejama

La Generalitat Valenciana ha aprobado la ampliación de una macrogranja de Porcino en Ayora, que pasará de tener capacidad para 750 madres reproductoras a albergar 7.200 cerdos de engorde en el municipio.

Las reacciones de la organización ecologista Amics de la Terra y la Plataforma contra la macrogranja de Ayora no se han hecho esperar. Estas manifiestan su descontento con la administración, la cual continúa aprobando ampliaciones de explotaciones de ganadería industrial “a pesar de los impactos negativos para su población y su medio ambiente”, como asegura Amics de la Terra.

Es irónico que la concejalía encargada de la emergencia climática y el desarrollo rural esté permitiendo la ampliación de estos controvertidos proyectos de industrialización animal”. Asimismo, la organización asevera que la aplicación de estos planes es una de las principales causas de despoblación en el mundo rural y del cambio climático con la generación de cantidades ingentes de emisiones de gases efecto invernadero.

En cuanto a una planificación de datos emitido y reflejado en el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana en fecha del pasado 17 de enero, esta explotación emitirá al año 78.765,80 Kg de metano, 39.339,64 Kg de amoniaco, 313.35 Kg de óxido nitroso y consumirá 36.792 m³ de agua, lo que equivale al consumo anual de 700 personas. (Ayora tiene una población de 5.200 habitantes, por lo que el consumo de agua de la macrogranja equivale al 15% de su población).

A más, la postura en contra de esta medida por parte de la población reside en que esta explotación conllevará la contaminación de las fuentes de agua potable, ya que la macrogranja se sitúa en zona de recarga del acuífero, del cual se abastece la población y posiblemente, se viera contaminado por nitratos.

Tal y como asegura Amanda Subiela, portavoz de Amics de la Terra Valencia, “no nos podemos permitir continuar profundizando en un modelo que devora nuestros recursos naturales y agrava la crisis climática”. Además, atestigua que “, el modelo ganadero industrial terminará cayendo tarde o temprano porque o bien los países a los que exportamos encontrarán otro proveedor más barato o, en contextos de emergencia climática, tendremos dificultades para acceder a las materias primas con las que se fabrican los piensos. Si China nos deja de comprar la carne, se termina el negocio para unos pocos.”

Respecto a la Plataforma contra la macrogranja de Ayora, los miembros se reunieron a principios de esta semana, tras conocerse la decisión de la Conselleria. El portavoz de la misma señala que el ayuntamiento de la localidad debería haber actuado con urgencia, ya que antes de que Conselleria aprobara y legalizara la ampliación, tenía la capacidad de paralizar el proyecto, pero ahora ya es tarde.

Por otra parte, la plataforma habla de “un proceso lleno de irregularidades”, ya que como asevera en su comunicado, “la empresa promotora recibió una subvención de 230.000€ incluso antes de contar con la Declaración de Impacto Ambiental aprobada”.

Para más datos, la negativa de estas dos asociaciones explica que, esta macrogranja, se sitúa cerca de terrenos Red Natura 2000 y hará uso d ellos para esparcir los purines, los excrementos dl ganado. Por ello, aseguran que el promotor necesitará 760,81 ha de superficie como base territorial sobre la que extender los residuos de los animales, que finalmente se llevará a cabo en áreas protegidas. La única condición que señalan ha interpuesto Conselleria, es que las parcelas situadas en Red Natura 2000 deberán abonarse fuera del periodo comprendido entre el 15 de marzo y el 15 de julio.

Este es un proceso que viene de fondo, y de muchos años atrás. Se conoce que la empresa integradora de este proyecto, Grupo Sánchiz, también es dueña de otra macrogranja muy polémica en Balsa de Ves, donde la población y el ayuntamiento llevan años denunciando los impactos de esta industria y viendo sus reclamos ignorados. Sin embargo, como aseguran las dos asociaciones ecologistas, la empresa ha sido galardonada por el propio Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación con premios “Cerdo de Oro por Sanidad, Medio Ambiente y Bienestar Animal”.

Como ocurre en el caso anterior, Ayora también lleva años luchando contra este y otros tres proyectos porcinos. Hasta la fecha se consiguieron paralizar tres de ellos, sin embargo, la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica acaba de legalizar la ampliación de esta macrogranja.

En su conclusión, Amics de la Terra reclama a la Generalitat y al Gobierno “que no participen en estas estrategias de ganado verde”. A más, hace un llamamiento a una moratoria contra la ganadería industrial: “Deberían ponerse a la altura de las exigencias de los distintos pueblos y establecer una moratoria inmediata a todas las macrogranjas y sus sucesivas ampliaciones”.

 

Comparte: Amics de la Terra Valencia y la Plataforma contra la marogranja de Ayora denuncian la aprobación de la ampliación de una porcina en la localidad