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Requena ( 26/04/19) 

Desde la plataforma de afectados del Sona La Dipu,  de la Diputación Provincial de Valencia, creada expresamente para denunciar los impagos que los grupos de música participantes en el concurso Sona La Dipu, que venían sufriendo desde 2017 y mantienen que la situación sigue parcialmente sin resolver.

Todos los grupos que tienen facturas por importes superiores a 5.000 €, afirma la plataforma, continúan sin cobrar y sin tener ninguna información firme al respecto, siendo la cantidad total que se les adeuda, de unos 30.000€.

Se da la circunstancia de que todo ello podría afectar a algún grupo de Requena, que ya ganó un premio con anterioridad y sí cobró la cantidad referenciada, pero en la actualidad están grabando un nuevo CD con 4 temas que lo financia, o debería, la Diputación a través de dicho programa.

Parece ser que algunos grupos afectados no disponían de CIF, con lo que no se les podían pagar las facturas y por ello acudieron a una empresa que gestiona esas facturas, pero no han sido abonadas a algunos grupos, indican.

La nueva situación del concurso, recientemente traspasado al Instituto Valenciano de Cultura, lejos de resolver sus dudas, presenta todavía más incógnitas. Ahora mismo no saben ni quién subsanará la deuda, ni cuándo, ni a quién tienen que dirigirse para resolver las generadas dudas al respecto.

Creen que La Diputación ha tenido tiempo suficiente para resolver esta situación. La comunicación continúa siendo nefasta, indican, con alusiones a plazos que nunca se cumplen, con una flagrante falta de interés por anunciarnos las novedades (o la ausencia de ellas) y, como han venido denunciado, una absoluta desprotección hacia las bandas participantes.

Piensan que un concurso que recibe tal cantidad de fondos públicos para apoyar a los grupos de música locales y para fomentar la cultura debería ser más transparente, más comunicativo y más responsable con sus compromisos. Afirman desde la plataforma que siguen sin cobrar, “absolutamente ignorados por Diputación y sin saber cuándo lo haremos, si es que lo hacemos”. A cada comunicado que emiten le sigue la promesa del pago en un breve lapso de tiempo, la promesa de una nueva reunión y la promesa de darnos nuevas informaciones. Ninguna de las promesas se cumple y la nueva situación del concurso solo arroja más oscuridad en lo que respecta a nuestra deuda explica la plataforma.

“Exigimos, por tanto, que se resuelva nuestra situación, que se nos comunique inmediatamente la situación de nuestros expedientes y que se nos pague lo que se nos debe con la máxima celeridad”.

Igualmente, pedimos al Instituto Valenciano de Cultura que no repita los errores de Sona La Dipu, que se acerque a la realidad de los músicos locales y que construyan un organismo para promover la música hecha en Valencia que verdaderamente apoye a los grupos”. “Sona La Dipu, lejos de cumplir esos objetivos, nos ha condenado todavía más a la precariedad a grupos pequeños que hemos tenido que asumir la deuda con nuestros fondos personales o de nuestras familias, provocando situaciones lamentables y graves perjuicios, mientras veíamos cómo artistas consagrados o festivales más que solventes, recibían de los fondos de Sona La Dipu, los pagos y el apoyo que nosotros no”.

Esta vez, además, se dirigen directamente a Toni Gaspar, presidente de la Diputación de Valencia para que tome cartas en el asunto y se asegure de que su equipo hace su trabajo y paguen lo que deben, apuntillan.

 

 

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