lunes, 25 enero
Esta tendencia favorable supone un 23 % más de superficie agraria asegurada hasta llegar a los 7,8 millones de hectáreas.
En cuanto a capital asegurado, se ha obtenido un nuevo récord de más de 15.200 millones de euros.
Requena, (25/01/21). Redacción.
La contratación de seguros agrarios ha experimentado una evolución muy positiva a lo largo del año 2020, tanto desde el punto de vista de las pólizas contratadas, como de la superficie, producción y capital asegurados. Las pólizas ascendieron a 416.000, un 5 % más que el ejercicio anterior, mientras que la superficie asegurada ha alcanzado los 7,8 millones de hectáreas, un 23 % más.
Estos datos, de la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (ENESA), organismo dependiente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), demuestran la implantación, cada vez más arraigada, de la cultura del seguro agrario.
Se trata de una tendencia favorable que contribuye al objetivo del Ministerio de garantizar, independientemente de las contingencias climáticas o de otro tipo, las rentas de las explotaciones agrarias.
Por sectores, destacan los incrementos que han experimentado el sector de los cítricos (8 %), y, sobre todo, los cultivos de herbáceos extensivos. En volumen, la producción asegurada ha alcanzado los 41 millones de toneladas, que suponen un 7 % más que en 2019. Y el capital asegurado ha marcado un nuevo récord, al superar los 15.200 millones de euros, 1.000 millones más que el año anterior, que suponen un incremento del 7 %.
Otras magnitudes del seguro se han mantenido en los mismos parámetros del año anterior. Así, el coste global de los seguros ha sido de 794,5 millones de euros que suponen apenas un 1% de incremento (783,4 en 2019).
Las subvenciones del Ministerio alcanzan los 237 millones de euros (239 en 2019) y las indemnizaciones por los siniestros, según datos provisionales de AGROSEGURO, se sitúan en torno a los 585 millones, cifra ligeramente inferior a los 592 del año precedente.
El sistema de seguros agrarios español se configura como un mecanismo de contribución público-privada, que contribuye a la estabilidad de las rentas de las explotaciones agrarias, al protegerlas frente a las adversidades climáticas u otros fenómenos naturales.
El MAPA es firme defensor de los seguros agrarios y, por eso, ha trabajado para que los, recién aprobados, Presupuestos Generales del Estado de 2021 (PGE2021) incluyan un incremento muy considerable en esta partida. Así, con relación a los cinco ejercicios precedentes, la dotación destinada a subvencionar las pólizas del seguro se incrementa más de un 19%.
El presupuesto, de más de 250 millones de euros, permitirá aumentar el apoyo a los asegurados, ya que se subvencionarán los recargos individuales derivados de una elevada siniestralidad o se dará un mayor apoyo a los agricultores jóvenes.
Las consecuencias de la borrasca Filomena son una buena prueba de esta necesidad de disponer de una cobertura para daños inesperados e imprevisibles. Aunque aún se desconoce la cuantía total, dado que se sigue haciendo la evaluación, los cultivos más afectados han sido las hortalizas de invierno, como la lechuga, la alcachofa, la coliflor y el brócoli, además de los cítricos y los cultivos permanentes y de arbustos, que han sufrido el peso de la nieve.
Fuente: MAPA.