miércoles, 17 julio
jueves, 10 enero
Requena (10/01/19)
Muchas empresas de la región se preguntarán si vale la pena el coste y la molestia de obtener certificaciones ISO e incluso de otro tipo para los diferentes negocios existentes en el mercado. Según diversos estudios, la respuesta a esas dudas es que la obtención de estos certificados es muy válida. El 98% de las empresas que poseen la certificación ISO opinan que es una buena o muy buena inversión para la propia empresa, según una encuesta de las Naciones Unidas en 2009. Una revisión en 2012 de 82 estudios sobre las certificaciones ISO llegaron a la conclusión de que la certificación tenía beneficios en los departamentos de operaciones, atención al cliente y en cuanto al compromiso de los empleados. A continuación, explicaremos qué son este tipo de certificados, sus tipos y aplicaciones en diversas industrias.
¿Qué son los certificados ISO?
La certificación ISO (International Organization for Standardization) certifica que un sistema de gestión, proceso de fabricación, servicio o proceso documentado tenga todos los requisitos para la estandarización y la calidad necesaria. ISO es una organización internacional no gubernamental independiente que desarrolla normas para garantizar la calidad, seguridad y eficiencia de los productos, servicios y sistemas. Las certificaciones ISO existen en muchas áreas de la industria como por ejemplo en la gestión de la energía de Repsol cuyo propósito es construir un futuro sostenible con mejores productos y diferenciados, la responsabilidad social con el caso del banco BBVA y la obtención de distintos certificados ISO relacionados con el medio ambiente en numerosos países de habla hispana. Igualmente está presente en dispositivos médicos como los que dispone la cadena de centros de salud privados Quirón Salud y que a su vez cuenta con 3 certificaciones ISO, además de sectores como en el juego online donde Betway Ltd. consiguió recientemente el estándar mundial ISO 27001 para la seguridad de la información acreditada por eCOGRA, la cual tiene acumulada una gran experiencia en la aplicación de normas y requisitos internacionales para la seguridad y privacidad del usuario y para garantizar un juego justo. Se han establecido normas ISO para garantizar la coherencia. Cada certificación tiene normas y criterios separados y está clasificada numéricamente como veremos más adelante.
Como propietario de una pequeña empresa, si planeas licitar en proyectos, en particular en licitaciones publicadas por corporaciones más grandes y organismos gubernamentales, es muy probable que te encuentres con el requisito de la certificación ISO. Aunque existen muchos tipos de certificaciones ISO, todas ellas están diseñadas para garantizar que los productos, servicios y procesos que utiliza una empresa se ajustan a las normas internacionales aceptables y que a su vez aumenta la confianza en el mercado a la hora de adquirir estos.
Algunos de los certificados ISO que podemos encontrar
La ISO ha publicado más de 22000 normas diferentes para bienes, servicios y procesos. Las más comunes son la familia de normas ISO 9000, que son normas que garantizan que los productos y servicios sean de alta calidad y que siempre estén en procesos de constante mejoría. La versión actual de 2018 es la ISO 9001:2015, que puede ser utilizada por cualquier empresa, en ella se tratan de 8 principios empresariales fundamentales como son la orientación al cliente, liderazgo, participación de las personas, enfoque por procesos, enfoque sistémico de la gestión, mejora continua, enfoque fáctico para la toma de decisiones y relaciones mutuamente beneficiosas con los proveedores.
Por su parte, la familia ISO 14000 es para la gestión medioambiental, que es utilizada, por ejemplo, por las empresas de gestión de residuos. Otros estándares están diseñados para industrias o sectores específicos, entre los que se incluyen la ISO 13485 para productos sanitarios, ISO/TS 29001 para la industria del petróleo y el gas, ISO/IEC 90003 para ingeniería de software, ISO 17582 para organizaciones electorales gubernamentales y la ISO 18091 para gobiernos locales. La documentación para cualquiera de estas normas, que especifica lo que se requiere para cumplir, puede adquirirse a la ISO o a un proveedor autorizado.
¿Por qué es importante la certificación ISO 9001?
Para poder vender en ciertas sectores o industrias es necesario tener la certificación ISO 9001. Un ejemplo es la industria automovilística, siendo este un caso muy conocido. Las normas ISO ofrecen un esquema de lo que hay que hacer en cada pedido, por ejemplo. La empresa, una vez obtenida la certificación, conocerá las normas que deben cumplirse y contarán con las herramientas necesarias para garantizar la calidad, la coherencia y la seguridad. Por lo tanto, la ISO establece los requisitos necesarios que la empresa debe de aportar, entre estos está el cómo deben verificar la calidad. Las normas de certificación ISO también ayudan a mantener a flote los productos y servicios más importantes de la empresa. Cuando las normas cambian, las empresas realizan cambios también. Cuando éstas trabajan con nuevos clientes, deberían de enviar los datos de sus certificaciones para que sepan que pueden esperar una alta calidad, establecida de antemano por las normas ISO.
Obtener estas certificaciones pueden resultar en una alta inversión si la empresa es pequeña o mediana, pero a la larga será una inversión bien realizada que podrá traer muchos beneficios a toda la corporación, a la cual le será más fácil y rentable comercializar sus productos en el extranjero, si más adelante decide hacerlo.
Muchas empresas de la región se preguntarán si vale la pena el coste y la molestia de obtener certificaciones ISO e incluso de otro tipo para los diferentes negocios existentes en el mercado. Según diversos estudios, la respuesta a esas dudas es que la obtención de estos certificados es muy válida. El 98% de las empresas que poseen la certificación ISO opinan que es una buena o muy buena inversión para la propia empresa, según una encuesta de las Naciones Unidas en 2009. Una revisión en 2012 de 82 estudios sobre las certificaciones ISO llegaron a la conclusión de que la certificación tenía beneficios en los departamentos de operaciones, atención al cliente y en cuanto al compromiso de los empleados. A continuación, explicaremos qué son este tipo de certificados, sus tipos y aplicaciones en diversas industrias.
Obtener estas certificaciones pueden resultar en una alta inversión si la empresa es pequeña o mediana, pero a la larga será una inversión bien realizada que podrá traer muchos beneficios a toda la corporación, a la cual le será más fácil y rentable comercializar sus productos en el extranjero, si más adelante decide hacerlo.
