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“La ilusión de hacer valer lo mejor de Ayora y su Valle”
Ayora (12/04/2022)- Laura Sánchez Benejama
El Abu es el nuevo Alojamiento Rural en Ayora. A decir verdad, es un concepto “todo en uno” singular que se abre a un rincón único que fusiona el clásico Bed&Breakfast, sumado de restaurante, terraza, piscina, y una pequeña bodega de vinos, todo resultado de un sueño que su propietaria tenía desde hace años.
Este lugar se estructura en cuatro habitaciones para cuatro personas cada una. Están pensadas para la comodidad de los núcleos a los que les resultaría incómodo reservar una segunda habitación, por lo que hace más fácil, y más asequible el viajar en grupo, o en familias con niños.
Mayte Martínez Ávila trabajó 25 años en consultoría de sistemas. Llegó a estudiar física nuclear con el objetivo de trabajar en la Central Nuclear de Cofrentes, pero entendió que el estrés y la falta de vida personal de esa profesión no era para ella. Volvió al pueblo de su familia, donde asegura no imaginar un verano sin este. Con la idea de creación de un lugar que representara ese cariño hacia la zona, como nos cuenta, soñaba “con hacer valer la calidad de Ayora y su Valle, para la gente de aquí y para los que vengan de fuera”.
Algo que ha tomado de forma literal es el proyecto “de Ayora para Ayora”, donde toda la infraestructura de la obra, materiales, y decoración ha sido proporcionada por profesionales y comercios de Ayora: “Al comprar todo aquí, sé que ya voy a poder contar con ellos. No tendría sentido hacerlo fuera”.
Mayte nos cuenta que la casa era de un abuelo de unos amigos, al cual solían visitar años atrás y llamaban “el abuelito”. El nombre de su negocio también incluye un valor sentimental que acoge a sus dos abuelos y a su bisabuelo en uno de los logos; uno de ellos fue uno de los primeros colmeneros de Ayora, y el otro, hizo la Casa Máximo del Pico Caroche, gran emprendedor de lo que algo ha heredado la nieta.
Con Mayte, son un total de 10 trabajadores. Lo que destaca en ese sentido es la idea “de un proyecto que es de todos”, dejando a un lado el negocio y formando equipo, lo que ella ya considera una familia en la cual este proyecto toma forma gracias a todos ellos.
“Nuestra intención es darle a la gente de Ayora lo que no había aquí, y a la gente de fuera, darles lo que es de Ayora”. Con estas palabras, David Parra, jefe de cocina de El Abu, habla de su labor, a un paso por delante en innovación y calidad. Asegura llegar en una época donde la hostelería está muy quemada, pero este era un proyecto ilusionante desde el principio del cual él quería formar parte.
Lo que quiere es plasmar Ayora en cada plato, tras haber contactado con todos los proveedores de la zona para que la calidad del producto no le permita fallar, y con un género con el cual no haga falta “disfrazar los platos”, como David alega. En su carta, junto a originales entrantes reinan 4 platos de cuchara, como son los gazpachos ayorinos, arroz del abuelo, del mar, y alubias con perdiz, todos ellos sin necesidad de encargo previo.
El punto más singular de la cocina de David es la utilización de huevos de gallina negra castellana de la granja la Barja de Tomelloso, por la cual ya ha obtenido un sello otorgado por el ministerio, por su calidad, sabor y por ayudar en la recuperación de esta especie autóctona.
Además, El Abu establece contacto con una vaquería vasca, Okelan, y ante cualquier encargo para celebraciones, los clientes pueden encargar cualquier producto, además de los que ya tienen, como son los chuletones, solomillos o hamburguesas angus.
EL Abu abrió sus puertas a finales de febrero, y ya despunta con el apoyo de todo su alrededor. Mayte y sus compañeros tienen muchas ideas por desembalar todavía. Entre ellas, enlazar servicios con ocio turístico, tales como rutas de senderismo, actividades acuáticas, entre otras muchas posibilidades que ofrece el Valle de Ayora-Cofrentes y con lo que preparar días completos diferentes para sus clientes.
Por lo pronto, su objetivo es “conseguir que la gente se sienta en casa”. Que se valore todo lo que proporciona la zona, tanto en comida, como en ocio y naturaleza. Sin duda, una visión de futuro de una mujer viajada y amante de la vida rural, la cual pone la firma a un bonito negocio, que más que eso, es un nuevo proyecto de vida.
Para todos los que tengan la inquietud de conocer este acogedor lugar, se encuentra en Calle Parras, 8, en Ayora.
