viernes, 5 enero
Según el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), el juez le imputa los delitos de tentativa de homicidio, allanamiento de morada, detención ilegal, daños, amenazas con arma blanca y quebrantamiento de medida cautelar.
En su auto, el juez acuerda, como le había pedido el Ministerio Fiscal, el ingreso en prisión al apreciar riesgo de fuga del imputado, que tenía una prohibición de acercamiento a la víctima y «múltiples procedimientos como investigado por quebrantamiento» de esta orden.
«La prohibición de acercamiento que pendía sobre el detenido se ha revelado del todo punto insuficiente puesto que a pesar de su existencia el investigado ha hecho caso omiso a la misma», según el auto.
El hombre fue detenido a primera hora de la tarde del pasado miércoles tras haber retenido durante horas a su expareja, haberle proferido «amenazas de muerte» y haber lanzado objetos contundentes por la ventana del domicilio.
El dispositivo policial para reducir al sospechoso se activó tras el aviso de una vecina del edificio de la calle de la Vendimia, donde sucedieron los hechos, que escuchó «gritos» y «amenazas de muerte» del supuesto agresor, de nacionalidad española, hacia su expareja, de la misma nacionalidad.
La pareja no tenía hijos y ella le había denunciado por malos tratos. De hecho, el hombre llevaba implantada una pulsera telemática que controla a supuestos agresores y avisa a las víctimas, aunque había logrado quitarse el aparato.
Alrededor de las 14.00 horas, un agente de la Guardia Civil vestido de médico entró en el interior del domicilio y logró detener al hombre.
La intervención policial, en la que no se efectuaron disparos, permitió liberar ilesa a la mujer, mientras que el supuesto agresor fue trasladado a los calabozos de la Guardia Civil de Requena, desde donde esta mañana ha sido puesto a disposición judicial y tras declarar se ha ordenado su ingreso en prisión. EFE