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Requena (30/12/19) Luis Ibáñez
Los viticultores de Requena-Utiel se encuentran inmersos en la poda de las vides, la actividad vitícola que más mano de obra genera; pero con un grave problema : la escasez de trabajadores.
Titulares de explotaciones vitícolas dicen que “ es una contradicción que las cifras de paro sean tan abultadas y que no haya trabajadores disponibles para la poda”.
Por su parte, Luis Javier Navarro, vicesecretario general de la Unión de Agricultores afirmó que uno de los problemas de la falta de podadores es que trabajadores que perciben una prestación “no renuncian a ella por un contrato de trabajo temporal, ante la incertidumbre que tienen sobre si la pueden recuperar cuando finalice el contrato”.
La Unió de Llauradors, igual que hace para la vendimia, se dirige a los agricultores que no tengan podadores para que comuniquen a la organización las necesidades que tienen de personal con el fin de gestionarles los trabajadores que necesiten. “Si fuera necesario los traeríamos de otros países ; pues resulta muy complicado encontrar trabajadores nacionales para el campo” explicó Luis Javier Navarro. “Además -agregó – la Unió se compromete a proporcionar la formación que precisen los trabajadores para podar correctamente las vides”.
La Unió de Llauradors se ha ofrecido a traer trabajadores extranjeros si fuera necesario
Empresarios agrícolas han manifestado que “no paramos de buscar trabajadores y hemos recurrido también a Empresas de Trabajo Temporal; pero no hay manera de encontrar personal para podar nuestros viñedos”.
Luis Javier Navarro también se refirió a “la baja cualificación de que dispone la mayoría de los escasos trabajadores que se encuentran para la poda” . En este sentido dejó claro que “hace falta que se pongan en marcha cursos de formación para los trabajadores”.
Agricultores de la comarca Requena-Utiel aseguran que se va a producir una floración prematura de almendros y otros frutales. Se basan al hacer este pronóstico en que “las temperaturas del pasado otoño y en los primeros días del invierno han estado por encima de sus valores normales”. También en que se han registrado menos escarchas y heladas de lo habitual.
Los persistentes vientos de poniente han llevado las temperaturas máximas, varios días en diciembre, a casi los 20° Centígrados y las mínimas hasta los 6° positivos. Lo normal, según la serie histórica de temperaturas, es que en la segunda quincena de diciembre las máximas oscilen entre los 7 y los 12° y las mínimas entre los 4° positivos y los -3°. En las últimas madrugadas las mínimas han vuelto a sus valores normales registrándose escarchas y heladas; pero las máximas continúan siendo suaves.
Los agricultores manifiestan que “las floraciones tempranas suponen mayor riesgo de que las heladas produzcan estragos en las cosechas”.
