Pequeños héroes locales que abastecen con sus productos a las aldeas en estos días de confinamiento

Requena, (24/03/20). Redacción.

Estos días de confinamiento en nuestras casas todos hemos oído hablar de héroes anónimos que aportan su granito de arena para luchar contra la pandemia que asola numerosos países; sanitarios, policía, guardia civil, camioneros, cajeras… y un largo etcétera. Pero además de estos superhéroes, hay otras personas que realizan una labor que apenas se ve pero que ayuda a muchas personas.

Es el caso de Nacho Pérez García un joven requenense de 27 años que es el presidente de la Asociación de Panaderos y Artesanos del Bollo de Requena y a su vez hijo de los dueños de Panadería Santiago Pérez ubicada en la pedanía requenense de El Pontón. Por las mañanas ejerce de panadero y por las tardes es monitor de Fútbol Sala Castillo de Requena, aunque ahora, claro está no puede hacerlo.

Lo que sí puede hacer es desplazarse para repartir alimentos en aldeas como Casas del Río, además de mantener dos locales abiertos 6 días a la semana; uno en Requena y otro en la pedanía de El Pontón. A Casas del Río llevan alimentos a los vecinos durante todos los días del año, aunque en los meses de invierno van únicamente los sábados, ya que la demanda es mínima. La población de la aldea en  invierno es muy baja. Por eso en las épocas en las que la población aumenta; pascuas, verano, festivos, etc se desplazan cada día.

Cuando van a la pedanía no sólo llevan pan, también proporcionan a los vecinos: dulces, bollos, leche, agua, huevos, carnes y embutidos, (previo encargo) y hasta productos de limpieza. Todo aquel que quiera puede llamarnos al 962300543 o mandar un whatsapp al 657699555 y le llevaremos, encantados, todo lo que nos pida.

El joven panadero explica que se trata de un trabajo realmente reconfortante porque “al hacer el servicio a las mismas puertas de cada cliente te lo agradecen mucho, sobre todo la gente mayor y te abren las puertas de su casa como si fuese la tuya propia”, explica.

“Nuestro día a día prácticamente no ha cambiado al menos respecto a lo laboral en la panadería. Seguimos levantándonos a la misma hora, abriendo y cerrando a la misma hora” matiza, pero, en su caso personal, “por las tardes sin embargo la cosa ha cambiado mucho, antes me iba a entrenar a niños/as y ahora me quedo en casa, pero siempre encuentro algo con que entretenerme y poder hacer más amenas las horas de cuarentena”.

Nacho Pérez explica que podría decirse que es panadero de toda la vida, “puesto que desde que nací he crecido en una panadería. Pero realmente el panadero no soy yo, actualmente la que ejerce como verdadera panadera y elaboradora de los productos es mi madre, Emilia García Bosque”.

Nacho Pérez agradecía a sus clientes la confianza depositada en ellos y pedía, por favor, que “si no es necesario salir, quedaros en casa. Nosotros podemos realizar reparto a domicilio si es preciso. Ahora toca arrimar el hombro y lo único que tenemos que hacer es mantenernos en casa”.