lunes, 20 julio
Una extensa zona del municipio de Requena resultó afectada por la tormenta con pedrisco el pasado sábado 18 de julio, que comenzó sobre las 17 horas, atravesando el municipio de sur a norte.
El fenómeno atmosférico que descargó piedras de gran tamaño dañó cultivos de vid, olivos, almendros y hortalizas; pero los datos de mayor consideración se observan en las viñas.
En una primera valoración Luis Javier Navarro, de la ejecutiva autonómica de la Unió de Llauradors estima que habrá unas 1.000 hectáreas dañadas de cultivos agrícolas».
En las viñas se calcula que «las pérdidas de cosechas van desde las menos dañadas que rondan el 10% y el 70% en las más afectadas».