jueves, 1 enero
La asociación requenense Mujeres por Derecho organizó una marcha por la igualdad el pasado domingo 10 de Marzo, con la sorpresa de ir marchando en batucada.
El pasado día 10 de Marzo, con motivo del día Internacional de la mujer 8 de Marzo, la asociación Mujeres por Derecho de Requena organizó una marcha para reivindicar la igualdad entre hombres y mujeres. La sorpresa de este año ha residido en que algunas de las socias de Mujeres por Derecho han aprendido a tocar batucada y han ido tocando durante toda la marcha, para, entre otras cosas, llamar más la atención sobre la causa. Son la Batucada Violeta.
Después de la marcha, las socias y todos aquellos que les quisieron acompañar, comieron en la Casa de la mujer «Dulce Chacón» sede de la asociación. Tras lo cual, se procedió a la lectura del manifiesto feminista que se leyó en la plaza de la Virgen de Valencia tras la manifestación del 8 de marzo. En el blog de la asociación se anuncian y detallan todas las actividades que llevan a cabo e incluyen fotografías. MANIFIESTO MOVIMIENTO FEMINISTA DE VALENCIA MANIFESTACIÓN 8 DE MARZO 2013. Hoy más que nunca, el movimiento feminista está convocado para exigir derechos laborales y sociales, reivindicaciones que venimos haciendo desde hace muchos años.
Hoy más que nunca salimos para pedir un cambio de dirección en las políticas del gobierno, que han llevado a las mujeres a una situación de desigualdad cada vez mayor, y a una pérdida de derechos de ciudadanía ya consolidados. Porque las mujeres, en vez de avanzar, hemos retrocedido. Estamos en un contexto de crisis estructural económica, política, social e institucional, y como parte de ella se están implantando un conjunto de medidas que no son solamente un conjunto de recortes, sino que suponen un cambio de modelo planificado. Una diferenciación cualitativa en todos los ámbitos de la vida. Es un cambio ideológico. Este cambio ideológico afecta a la economía: privatizaciones, reforma laboral y de pensiones, así como a la negociación colectiva. Recortes en servicios públicos, que está desmantelando el Estado del Bienestar. Pero también al ámbito social y político. En este contexto, el papel de la mujer en la sociedad, las conquistas consolidadas por medio de la lucha es también uno de los ámbitos afectados. Podemos afirmar que hay un rearme del modelo patriarcal, una nueva vuelta de rosca. Este cambio de modelo afecta de manera más cruel a las mujeres. No olvidemos que cuando se desmantela el Estado del Bienestar, se desmantela el costal feminizado del estado: educación, sanidad, políticas sociales, atención a la dependencia. Cada vez más se muestran las desigualdades reflejadas a lo largo de toda la vida, que se agravan según se cumplen años y están convirtiéndose en una amenaza real para las mujeres de mayor edad, que han trabajado toda su vida en la casa, al cuidado de su familia, dando soporte a negocios familiares, y no obstante sus pensiones son bajas y se derivan de su estado civil. Si llegan a percibir una pensión de sus años de trabajo, esta suele ser inferior a la de los hombres por diversos factores: las mujeres padecen la parcialidad, la temporalidad, la diferencia salarial, la interrupción o cese de la carrera laboral para cuidar de los hijos, familiares enfermos o mayores, y una mayor tendencia a ocupar trabajos que les permitan conciliar. Pero además, las mujeres padecemos un ataque feroz sobre nuestra salud y nuestra libertad, como es el derecho a decidir sobre nuestra maternidad, sobre si queremos ser madres, cuando y cómo queremos serlo. El anuncio de reforma sobre la Ley de interrupción voluntaria del embarazo, por parte del ministro Ruiz Gallardón, retrotrae a las mujeres a los años 70, donde la interrupción del embarazo era clandestina y penalizada. Esta nueva penalización, viene a satisfacer a la iglesia católica misógina, y al sector más retrógrado y fascista de la derecha española. También las tasas judiciales son un obstáculo más para que las mujeres denuncien el maltrato a la policía. Aunque denunciar el maltrato no tiene coste, sí lo tiene romper el último lazo con el agresor, recurriendo al divorcio y repartir los bienes del matrimonio será ahora más caro, y por tanto un obstáculo para que las mujeres víctimas de violencia sigan adelante con los procesos policiales. Y por eso, divorciarse, hacer una liquidación de bienes o interponer una petición de pensión compensatoria será más caro. Es necesario que de forma sistemática se eduque en valores de igualdad, y se eliminen del sistema educativo las actitudes y las enseñanzas que favorecen conductas sexistas, para evitar las campañas publicitarias donde la mujer se vende como objeto sexual, como es el caso del “Body Sushi”, donde se coloca una mujer desnuda sobre una mesa y le llenan el cuerpo de comida como si se tratara de una bandeja. El asesinato, las violaciones y mutilaciones genitales a las mujeres se mantienen en tasas insoportables. La violencia de género, este gran problema social, donde los hombres asesinan a sus mujeres y, cada vez más, a sus criaturas como medida para causar más dolor a sus madres. Los recortes económicos y sociales repercuten directamente en la prevención, la detección y el abordaje de este terrorismo machista. Son necesarias medidas efectivas de protección para las mujeres que sufren malos tratos y de las personas de su entorno afectivo. Pero también la inversión en la red asistencial. En prevención y formación de todo el personal que interviene en el proceso, y programas reales de inserción laboral. Porque solo la independencia económica les ayudará de verdad a salir del círculo de la violencia. La Ley del matrimonio igualatorio por fin es constitucional, pero todavía queda mucho por recorrer. Que se respete desde todos los ámbitos como el de la educación, el legislativo, el laboral y el sanitario. En cualquier otra relación de pareja que no sea la heterosexual, que dicta la jerarquía eclesiástica y los sectores más conservadores, encuentra todavía un muro de para poder llegar a la ciudadanía llena de derechos, a la igualdad real. El uso de un lenguaje misógino y sexista, que invisibiliza a las mujeres y llena los medios de comunicación, las redes sociales y los libros de texto, está protegido por un club fruto del patriarcado, como es la Real Academia de la Lengua, que justifica como arma para impedir un discurso igualitario e inclusivo. Ante estos ataques, MANIFESTAMOS:
Ø Queremos más participación en la vida pública, y la eliminación de la reclusión en el espacio privado doméstico. El espacio público no es patrimonio exclusivo del género masculino. Pedimos la igualdad real entre mujeres y hombres, aplicándose este concepto en los diversos ámbitos de toma de decisiones.
Ø Exigimos el reparto del trabajo remunerado y del no remunerado, trabajos domésticos y de cuidado, en igualdad de condiciones entre mujeres y hombres. Urge que el Gobierno del Estado ratifique el Convenio 189 de la OIT, por la dignificación del trabajo doméstico asalariado.
Ø Exigimos que el aborto sea libre, gratuito, en la red pública, en condiciones seguras y por la simple decisión de la mujer. Las mujeres parimos, las mujeres decidimos!
Ø Exigimos una escuela pública, laica y coeducadora. Es necesario un cambio radical en la sociedad, crear un modelo social basado en el respeto a la diversidad y que garantice una educación sexual y afectiva en todos los niveles de la enseñanza.
Ø Queremos un vida libre de violencia machista, en cualquiera de sus formas y pedimos la implicación de toda la sociedad en la lucha por su erradicación.
Ø Denunciamos la violación de los derechos humanos de las mujeres inmigrantes recluídas en el centro de internamiento de personas extranjeras.
Ø Reivindicamos el derecho al cuidado de las personas en situación dependencia y denunciamos la doble discriminación de las mujeres con diversidad funcional, sensorial o mental.
Ø Exigimos la aplicación de la Ley de Promoción de la Autonomía Personal, y denunciamos la política de recortes en las ayudas previstas en la Ley.
Ø Exigimos el cumplimiento efectivo de la Ley de Igualdad vigente desde hace seis años. Que se promueva la igualdad real entro mujeres y hombres eliminando los obstáculos y estereotipos sociales que impiden conseguirla.
Ø Denunciamos la discriminación por la orientación sexual o identidad de género. Pedimos que las mujeres lesbianas, transexuales o bisexuales se visibilicen en todos los ámbitos de la sociedad y disfruten de las mismas oportunidades.
Ø Reivindicamos una Ley Integral para mujeres transexuales que dé respuesta a todas sus necesidades, todavía no cubiertas en materia sanitaria, social y laboral y el respeto a los derechos conseguidos en materia legal.
Ø Rechazamos cualquier ordenanza municipal sobre la prostitución que criminalice a las mujeres. Exigimos la persecución de las mafias y proxenetas que explotan a las mujeres y las niñas, y exigimos medidas de protección y políticas públicas activas de inserción sociolaboral para todas aquellas mujeres que quieran salir de esta situación. No vamos a consentir NI UN PASO ATRÁS EN NUESTROS DERECHOS. Las movilizaciones y mareas violetas del movimiento feminista son nuestro grito organizado. Ahora más que nunca, ¡VIVA LA LUCHA FEMINISTA!