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Venta del Moro (06/07/22)

La lluvia que  cayó ayer  tarde ha dado «una tregua» a los distintos efectivos que trabajan en el control del fuego, que evoluciona «favorablemente» ya sin llama. Los medios terrestres han trabajado durante toda la noche y realizan revisiones con drones para revisar todo el perímetro con el fin de poder detectar puntos calientes.

Las tormentas han ayudado y no se tiene constancia de que el fuego haya afectado al parque natural de las Hoces del Cabriel, el incendio «no ha avanzado», por lo que el perímetro «sigue siendo el mismo»: 1.300 hectáreas.

A última hora de la tarde se reforzaron los trabajos en la franja izquierda del perímetro, en la parte limítrofe con el parque natural, donde «se siguen intensificando los trabajos con maquinaria potente para reforzar los cortafuegos».

Tras las tormentas, se reincorporaron los medios terrestres y durante  la noche se realizan vuelos con drones para revisar todo el perímetro con el fin de «poder detectar puntos calientes» para actuar.

Hasta un total de 500 efectivos de lucha contra el fuego están activados en el incendio, de los que 300 son bomberos del Consorcio Provincial y la Generalitat, con apoyo de personal de Castilla-La Mancha, otros 237 miembros de la Unidad Militar de Emergencias, además de 30 medios aéreos, entre los propios, los castellano manchegos y los facilitados por el Estado.

El operativo se centra en levantar con maquinaria grandes cortafuegos que impidan que el fuego, que afecta ya a 1.300 hectáreas, alcance el paraje de las Hoces del Cabriel.

 

 

 

 

 

 

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