lunes, 18 diciembre
Requena (18/12/23)
La DO Utiel-Requena ha seleccionado al Enterizo Bobal Rosado de Coviñas como uno de los vinos que representará a la Denominación de Origen en todos los actos promocionales que desarrollará hasta 2024, tales como ferias, eventos, presentaciones de producto, catas públicas o degustaciones.
Un concurso mediante cata ciega realizado por el comité de cata del Consejo Regulador la DOP Utiel-Requena valoró las cualidades de tres categorías de vino: Blanco Utiel-Requena, Rosado de Bobal Utiel-Requena y Espumoso Utiel-Requena.
De entre los rosados probados, el Enterizo Bobal Rosado de Coviñas ha sido el mejor puntuado en su categoría de Rosado Bobal. Se trata de un monovarietal 100% bobal, de color rosa intenso, con reflejos violáceos, cuyo aroma recuerda a la más dulce infancia, con toques de chicle y gominola de nata-fresa.
Fresco, frutal y equilibrado con paso suave a la vez que persistente pertenece a la gama Enterizo, buque insignia de la bodega, al ser uno de los primeros vinos embotellados de Requena. Este rosado de Bobal, varietal por excelencia de la zona, destaca por su frescura y es muy apreciado en Requena donde ya recibió, en agosto de este mismo año, la medalla de oro en la feria Ferevin, que se celebra anualmente en conmemoración a la vendimia.
Acerca de Coviñas
Grupo Coviñas es un grupo vinícola nacido en Requena en los años 60 tras la unión de los viticultores de 10 cooperativas de la zona, con el objetivo de potenciar sus vinos y ofrecer la mejor calidad. En la actualidad, ostenta una posición de liderazgo en la DOP Utiel-Requena, donde reúne a más de 3.000 familias entorno a un proyecto común, el vino, y es propietaria de más del 41% del viñedo, adscrito a la DOP UR.
En Coviñas creemos que lo esencial, es simplemente extraordinario. Vivimos en respeto con la naturaleza que nos rodea y que devuelve el afecto que recibe con un regalo lleno de vida y frutos. Nuestra fuente de aprendizaje es el campo, que lleva años cultivándonos en los valores más esenciales. Llevamos décadas trabajando en sincronía con nuestro entorno, respetando sus ciclos, valorando su diversidad. Hemos aprendido que somos parte de ella y ahora tenemos un fin común.
