lunes, 16 noviembre
Requena (16/11/20) Luis Ibañez
La Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica ha iniciado el proceso para la regulación de la nueva normativa de agrocompostajes en la Comunitat Valenciana. Con esta medida se pretende avanzar de manera pionera en los procesos de reducción en la generación de residuos y autoconsumo de proximidad, de restos agrícolas, ganaderos, silvícolas y agroforestales.
La consellera del organismo, Mireia Mollá ha explicado que la nueva normativa de agrocompostaje tiene como objetivo fundamental «establecer un marco normativo de gestión sostenible de este tipo de residuos, en un entorno de economía circular y de mitigación de cambio climático en el territorio de la Comunitat Valenciana».
Nota de prensa de Consellería
La Conselleria de Transición Ecológica inicia el proceso para regular el agrocompostaje de proximidad en la Comunitat Valenciana
– La nueva normativa pretende avanzar de manera pionera en los procesos de reducción de restos agrícolas, ganaderos, silvícolas y agroforestales
– Mireia Mollá asegura que el objetivo es establecer un marco de «gestión sostenible en un entorno de economía circular y de mitigación del cambio climático»
La Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica ha iniciado el proceso para la regulación de la nueva normativa de agrocompostajes en la Comunitat Valenciana que pretende avanzar de manera pionera en los procesos de reducción en la generación de residuos y autoconsumo de proximidad, de restos agrícolas, ganaderos, silvícolas y agroforestales.
La consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollá, ha explicado que la nueva noramtiva de agrocompostaje tiene como objetivo fundamental «establecer un marco normativo de gestión sostenible de este tipo de residuos, en un entorno de economía circular y de mitigación de cambio climático en el territorio de la Comunitat Valenciana».
El trámite para desarrollar esta nueva norma ha estado precedido de una consulta pública previa y viene avalada por los trabajos científico-técnicos elaborados por la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH), para el establecimiento de los parámetros técnicos y de dimensionamiento de los diferentes tipos de centros de agrocompostaje, tanto de los de carácter basal (pequeño tamaño), como los de escala media.
Para llevar a cabo estos trabajos, la UHM ha contado con la subvención de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, a través de la firma de diferentes convenios de colaboración, que se mantendrán a lo largo del próximo año 2021.
En el desarrollo de los trabajos previos y de la propia orden están colaborando activamente diferentes departamentos de la Conselleria en materia tanto de prevención y gestión de residuos, como de agricultura.
Mireia Mollá ha señalado que el agrocompostaje de proximidad puede ser considerado como una «operación de prevención de residuos», en sentido amplio, y no como una actividad de gestión de residuos, «siempre y cuando el producto obtenido se utilice en las explotaciones de las personas promotoras, y se cumplan los umbrales y condiciones que garanticen una mínima afección de los procesos y las instalaciones al medio ambiente y a las personas».
Concretamente, se pretende generar un entorno propicio para la mejora continua en la gestión de residuos, tal y como se contempla en el Plan Integral de Residuos de la Comunitat Valenciana (PIRCVA2019), desarrollando iniciativas de prevención en materia de tratamiento de flujos residuales del sector agrícola, ganadero o incluso asimilable al doméstico, que pueden tratarse mediante sistemas de compostaje de proximidad, introduciendo la economía circular en la gestión agrícola y ganadera de la Comunitat Valenciana.
Para Mireia Mollá, se trata de «generar actividad económica de proximidad, sobretodo entre la población rural y minimizar los residuos que se producen en este sector, pasando a gestionar la fracción orgánica como un recurso y no como un residuo».