domingo, 31 diciembre
Requena (21/12/17) Elmundo,es/ Francisco Alvarez
A los productores de cava valenciano se les ha atragantado el brindis de esta Nochevieja. Finalmente, el Ministerio de Medio Ambiente se ha plegado a las peticiones de los bodegueros catalanes y ha acordado frenar de forma sustancial el incremento de nuevas hectáreas de viñedo en 2018. La restricción no será total, como pretendía el consejo regulador de la Denominación de Origen (DO), pero la superficie autorizada para el próximo ejercicio -una cifra sobre la que, además, existe cierta confusión- no superará en ningún caso las 172 hectáreas para todo el país.Se trata de una nimiedad si se tiene en cuenta que sólo en el término de Requena -el único de la Comunidad Valenciana admitido en la DO- se encuentran pendientes de regularización y reestructuración cerca de 1.500 hectáreas, que por ahora no podrán producir cava. No es de extrañar que la resolución que ayer publicó el Boletín Oficial del Estado (BOE) indignara tanto a viticultores como a la propia Generalitat. De hecho, el Consell valora recurrirla a los tribunales junto a la Junta de Extremadura -la otra zona productora damnificada- si no se alcanza un improbable acuerdo con el Ejecutivo central.
«El Gobierno ha abandonado definitivamente el futuro del cava valenciano», sentenció en declaraciones a este diario el secretario autonómico de Agricultura, Francisco Rodríguez Mulero. El dirigente socialista asegura que la decisión adoptada por el Ministerio es incompatible con el plan de negocio de la Asociación de Elaboradores de Cava de Requena, que preveía duplicar la superficie de cultivo. El espumoso valenciano no sólo crece a dos dígitos en el mercado nacional, también ha disparado sus ventas en el exterior, mientras que las bodegas catalanas se han estancado. «Si no aumenta la superficie no podrán cumplir sus previsiones» insistió Mulero, quien lamenta, además, que el Ejecutivo central haya hecho oídos sordos a las alegaciones del Consell y a la resolución adoptada por unanimidad -incluido el PP- en las Cortes. Para la consellera Elena Cebrián directamente se «cercena» el futuro de Requena «sin ninguna justificación técnica».Este frenazo a la producción pone en riesgo alrededor de 20 millones de euros en inversiones acometidas tanto por bodegas como por agricultores, que han recibido ayudas públicas para reconvertirse. De hecho, los viticultores que se han acogido al proceso de reestructuración, que finaliza el próximo verano, tenían previsto plantar en pocas semanas miles de plantones. En cualquier caso, el secretario general del Ministerio de Agricultura, Carlos Cabanas, se reunirá el próximo martes con los productores de Requena para explicarles los detalles de la resolución.