viernes, 11 marzo
Aumento desorbitado de los costes de producción, de los precios al consumidor y desabastecimiento alimentario
Requena (10/03/22)- AVA-ASAJA
El prestigioso periodista agroalimentario y director de Agropopular, César Lumbreras, analizó las perspectivas de la Política Agrícola Común (PAC) en el transcurso de una jornada organizada ayer por la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) y Banco Santander, un encuentro al que asistieron más de cien personas y que se completó con la firma de un convenio de colaboración entre ambas entidades para facilitar ventajas a los asociados en la tramitación de la PAC y otros servicios.
Lumbreras prevé que “va a haber un antes y un después de la guerra en Ucrania” en el diseño de las políticas agrarias europeas porque “tal como está pensada ahora la PAC no sirve para cumplir los objetivos de garantía de rentabilidad y de autosuficiencia alimentaria”.
“En la pandemia, la cadena agroalimentaria funcionó, no hubo problemas de autoabastecimiento. Sin embargo, con la actual guerra el mercado de los cereales está roto, de manera que el problema no es solo el aumento desorbitado de los costes de producción y de los precios al consumidor, sino también el abastecimiento alimentario. España es muy dependiente sobre todo de trigo, y si finalmente Rusia conquista Ucrania el 25-30% del suministro mundial del trigo estará en manos rusas”.
Al respecto, Lumbreras recordó que “la Unión Europea no está produciendo toda su superficie potencial de cereales, oleaginosas y proteaginosas y hay voces que piden que se echen atrás las restricciones del barbecho. Eso supondría que la nueva PAC no vería la luz o nacería muerta. Es necesario que Bruselas garantice lo máximo posible el abastecimiento de alimentos y de energía. No hay que desdeñar la parte verde de la PAC, pero debemos volver a cuidar la parte productiva”.
En respuesta a preguntas de los asistentes sobre las importaciones foráneas, Lumbreras subrayó “el problema evidente de la competencia desleal que hay que solucionar”. Con todo, “el dilema que se suma ahora es si hacemos la vista gorda para que lleguen cereales de Brasil, Argentina, Estados Unidos o Canadá que en muchos casos chocan con prohibiciones de la UE en materia de transgénicos o el uso de materias activas suprimidas. ¿Tenemos manga ancha con estas importaciones o sufrimos escasez?”.
El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, coincidió en que “la PAC no garantiza el funcionamiento de la cadena alimentaria, donde el productor es el eslabón que pierde. Además, los acuerdos comerciales, que se firman sin reciprocidad y con estudios de impacto obsoletos, cuando los hay, están dejando a los productores europeos con las manos atadas. Mientras los otros países apuestan por la edición genética, Europa está en la higuera. A este paso, lo único que va a seguir funcionando son los buenos sueldos que se pagan en Bruselas”.
Por su parte, la responsable de Negocio Agroalimentario de Santander España, Lorena Ruiz, resaltó “el firme compromiso que vamos a mantener hacia los agricultores y ganaderos en estos momentos tan difíciles, de tal manera que vamos a seguir acompañándoles para facilitar su actividad profesional”.