La empresa encargada del mantenimiento de la piscina de Requena en el punto de mira

Requena, (05/07/23). Redacción.

El malestar y enfado de los usuarios de la piscina pública de Requena se ha acrecentado estos últimos días al detectar que las aguas de la piscina grande se habían vuelto de un color verde esmeralda, llegando incluso a tener que desalojar las instalaciones para comprobar el estado de las mismas y en concreto del agua. De hecho, al poco de ser inaugurada la temporada de baño tuvo que volver a cerrar hasta solucionar el problema.

El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Requena, y entre ellos el concejal de deportes, Julio E. Martínez, se puso inmediatamente en marcha para solventar la situación ya que por algún motivo que hasta el momento se desconoce, los productos químicos que se añaden a las aguas “no están interactuando como deberían”, explica el concejal. Algo muy extraño dado que en la piscina mediana se usan los mismos y en ésta el agua está perfectamente.

En cualquier caso, el edil de deportes afirma que lo están estudiando, además de estar a la espera de otros productos para ver si actúan correctamente, además de filtrar toda el agua de la piscina. La concejalía está en contacto con la empresa encargada del mantenimiento desde el primer día y desde la misma le dicen que “es una cosa muy rara, están buscando soluciones”, explica.

Según ha podido saber esta revista, la adjudicación de las tareas de mantenimiento de la Piscina Municipal de Requena se llevó a cabo por el anterior equipo de gobierno unos días antes de las elecciones,  el pasado 24 de mayo a la empresa, Ilitia Mediterránea S.L.; se trata de una empresa que se encarga de Instalaciones deportivas, escuelas de deporte y servicios de perfeccionamiento del deporte, básicamente se encarga de la gestión de instalaciones deportivas.

Según hemos podido averiguar por otras publicaciones aparecidas en el mes de abril en el periódico Alicanteplaza esta misma empresa ilicitana fue la protagonista hace unos meses de una cascada de adjudicaciones en universidades, instalaciones municipales como la de Requena, institutos y centros militares, pese a hallarse en causa legal de disolución, al contar con un patrimonio neto negativo, algo que parece que ha influido en la actitud de los los usuarios que  critican el servicio de la empresa  ante la avalancha de quejas en la Universidad de Alcalá contra Ilitia.

A la pregunta de si han considerado la posibilidad de un boicot, Julio Martínez explica que no descartan nada, siempre desde la prudencia, y alega que si lo consideraran oportuno lo denunciarían donde corresponda.

Martínez manda un mensaje a los vecinos, “estamos trabajando a tope, nuestra prioridad es la piscina”, no solo por dar el servicio a los ciudadanos, se acercan los campus, añade.