jueves, 28 enero
Compromís ha registrado una serie de preguntas dirigidas al Gobierno central para exigir el cierre de la actividad de la central nuclear de Cofrentes (Valencia), que estaba recogido en los permisos originales que contemplaban el cese de su utilización en marzo del 2021 y no en 2030, como se apunta ahora. En un comunicado, su portavoz en el Senado, Carles Mulet, ha recordado que en 2020 ya presentó una serie de cuestiones dirigidas al Ejecutivo con el fin de evitar la prórroga.
Requena (28/01/21) EFE
Compromís ha registrado una serie de preguntas dirigidas al Gobierno central para exigir el cierre de la actividad de la central nuclear de Cofrentes (Valencia), que estaba recogido en los permisos originales que contemplaban el cese de su utilización en marzo del 2021 y no en 2030, como se apunta ahora.
En un comunicado, su portavoz en el Senado, Carles Mulet, ha recordado que en 2020 ya presentó una serie de cuestiones dirigidas al Ejecutivo con el fin de evitar la prórroga de la actividad de la central nuclear a causa de las acciones de la empresa explotadora del suministro, Iberdrola, que pretende alargar la licencia hasta 2030, pero según su partido, esas preguntas «demostraron» la voluntad del Gobierno de «plegarse a los intereses empresariales».
Para Mulet, este hecho fue «una burla a la propia voluntad de Les Corts Valencianes», que habían pedido a través de una Proposición No de Ley el cierre definitivo de estas instalaciones, «y a la propia lógica y compromisos electorales de los partidos en el Gobierno de apostar por una transición energética hacia la sostenibilidad», por lo que ha calificado la renovación de la licencia de actividad de «insostenible».
En 2020, el Gobierno central explicó que estudiaba la opción de aplazar el cierre de la central nuclear de Cofrentes hasta noviembre de 2030 «con la excusa», según Mulet, de que el Consejo de Seguridad Nuclear es el encargado de vigilar que el funcionamiento de dichas instalaciones no represente riesgo alguno para los trabajadores ni para las personas o medio ambiente.
A su juicio, el posible aplazamiento del cierre se debe a una decisión política «y no técnica», y ha tildado de «preocupante» que los partidos que apostaban por el cierre de las centrales nucleares españolas en 2024 «hayan difuminado esas exigencias». EFE