SI LEEMOS CRECEMOS // Rosana Gutierrez Tapia
¡Ojalá no se celebrara este día! Cuando se celebra el día por algo es que está a punto de morir.
No es fácil expresar en una sola página todos los sentimientos que me están llevando a mover el cuidado del Planeta. No lo es, porque son años de sentir muy dentro que algo siempre podemos hacer, sin excusas, aunque nos parezcan más que justificables…
Como escritora me resulta emocionante ponerme en el papel de un personaje y sentir cómo piensa, cómo es su diálogo interno, sus emociones respecto a las creencias más importantes de su vida…pero, ahora, que me toca a mí, que deseo expresaros mis sentimientos sobre algo que me ha movido desde hace muchos años, algo que crecía en mi interior como una llama ardiente y, que explotó cuando la responsabilidad de educar a mis hijos en el amor al medio ambiente y los animales, me hizo crear historias que les hicieran entender que eso no era elegible, sino una necesidad de primer orden, que no se podía cuestionar nuestro papel en el cuidado de la misma vida.
Así surgió “Salvemos la Tierra. SOS por la Tierra con voz de niño.” Una historia sobre el desafío del planeta, sobre la emergencia climática que vivimos.
Volviendo a los sentimientos y emociones que produce este tema, dentro de mí se ha librado una gran batalla como un apocalipsis donde el bien y el mal, donde lo más radical y el equilibrio se han fusionado para dar paso a la búsqueda del enfoque positivo. No queda más, no se puede combatir un problema desde el mismo lugar donde se ha creado, decía Einstein, y por eso no podemos mover intereses creados de bienestar, ni políticas egoístas e ignorantes que fuerzan el desastre…ya hay personas enfocadas ahí…y tal vez, rompiendo las leyes del universo, esas leyes exactas que a veces, olvidamos por dejadez o porque nos parece demasiado esfuerzo recrearnos, reinventarnos y sobrevivir a lo que siempre, por inercia, nos hace funcionar como autómatas programados.
Nunca pensamos bien del que se sale del redil, como ovejas, debemos caminar todos hacia un mismo camino, pero ya ha llegado el momento de despertar, porque si no lo hacemos, ya sea por temor a lo que llega o por decisión, no habrá un mañana en el que amanecer, no habrá aire que respirar, y nos extinguiremos, pasando a la historia como la raza más estúpida y autodestructiva que se pueda pensar…
Volviendo al equilibrio, me decanto por crear un enfoque de energía positiva, y como dice la ley de la atracción: “Aquello en lo que te enfocas, se expande.” Pues eso quiero, que se expanda el amor hacia nuestra preciosa Tierra, que despierte dentro de nosotros, como siempre ha estado, y de nuevo, volvamos a recordar nuestro legado como habitantes de esta madre, que es la Tierra.
Si creamos conciencia de esta realidad, no sólo recuperamos la visión perdida por la tecnología y cultura del consumismo que, hace que amemos más a nuestro móvil que a nuestros hijos, sino que, además nos encontremos otra vez con nuestra grandeza, la que nos hace humanos, la que nos reconoce fuertes, inteligentes y valientes…
Ha llegado el momento de demostrarlo, cada uno, desde donde está, y haciendo aquello que mejor sabe hacer…
¡No te escondas a la llamada del Planeta, no queda tiempo para pensar, ya está todo pensado! ¡ACTÚA AHORA!