Rosana Gutiérrez
Un nuevo comienzo. Como cada navidad, todos sentimos que el cambio de año nos da una nueva fuerza para realizar cosas diferentes. Nos sentimos con ganas de cambiar hábitos que conviven décadas con nosotros y un año más, pensamos que esta vez, sí lo vamos a conseguir.
Entre los propósitos hay cosas pequeñas, sencillas, como terminar algo que dejamos a medias…pero también hay propósitos enormes como es mejorar la salud, bajar de peso, ganar más dinero, y cómo no, que la política mejore, aunque nos conformábamos con tener gobierno simplemente. Deseamos que se mejore el trabajo con más empleos y que la tierra tenga dos grados menos al final de este recién estrenado 2020.
Hoy me gustaría centrarme en el dicho popular: “Cuando sabes lo que siembras, no temes la cosecha,” porque si centramos nuestra atención en las cosas positivas que ya están pasando, recogeremos más y más beneficios para mejorar nuestro mundo. Si cada uno mejora su mundo…claro que repercutirá en todos los demás, en los que te rodean, y hoy, gracias a las redes sociales, incluso puedes llegar a aquellos que están a miles de kilómetros.
Os voy a compartir una serie de noticias positivas, porque después del fracaso de la COP25 en Madrid, después de la dura realidad que se está viviendo en Australia, es preciso creer y sentir que es posible la mejora, que podemos curar este planeta, que es nuestra casa, y que estamos todos conectados. Sabéis que uno de mis propósitos de vida como escritora es llevar este mensaje: “Salvemos la Tierra,” para niños y jóvenes, porque creo, sinceramente que el cambio de mentalidad está en la educación. Hoy, me gustaría acercaros este mensaje a vosotros, los lectores de este medio, para que juntos, sembremos positividad.
(Fuente: The Happy Broadcast)
Esto sólo es una representación de todas las cosas buenas que suceden cada día, espero y deseo que al conocerlas nos movamos más en positivo, sembrando semillas de agradecimiento y confianza. Deseo que las compartamos y crear esta conciencia de mejorar todo aquello que esté en nuestras manos.
¡Si sembramos éstas semillas, no temeremos la cosecha!
Rosana Gutiérrez
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