viernes, 13 abril
– José Manuel Benitez, representante de COAG en la delegación de Coordinadora Europea Vía Campesina, ha intervenido en el Grupo de Trabajo Intergubernamental que del 9 al 13 de
abril negocia en Ginebra la propuesta de declaración de Naciones Unidas (ONU) sobre los derechos de los agricultores/as y las personas que viven y trabajan en las zonas rurales.
– COAG apoya esta histórica declaración porque aseguraría los derechos de los campesinos a alimentar a sus comunidades locales, obtener unos ingresos dignos y proteger los sistemas alimentarios más sostenibles y diversos para el conjunto de la sociedad.
Ginebra / Madrid, 12 de abril de 2018. La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha mostrado su más firme apoyo a la propuesta de declaración de Naciones Unidas sobre los derechos de los campesinos y las personas que trabajan en las zonas rurales, durante la reunión del Grupo de Trabajo Intergubernamental de la ONU que del 9 al 13 de abril negocia en Ginebra el texto final.
Durante su intervención, el representante de COAG en la delegación de Coordinadora Europea Vía Campesina, José Manuel Benitez, ha subrayado que uno de los pilares básicos para garantizar los derechos de los campesinos/as se sustenta en unos precios justos para sus producciones. “Los precios que recibimos llevan años estancados mientras que los costes de producción no dejan de subir. Eso supone que no haya una renta agraria digna porque en ocasiones los precios percibidos por los agricultores no llegan a cubrir los costes de producción. Una renta digna para los pequeños y medianos agricultores/as y ganaderos/as sería vital para el conjunto de la sociedad porque garantizaría una alimentación sana y diversa a un precio justo, al tiempo que se protegería el medio ambiente, la biodiversidad y desarrollo sostenible del medio rural”, ha afirmado Benitez.
COAG considera “histórica” la futura declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los agricultores porque aseguraría los derechos de los campesinos a alimentar a sus comunidades locales, obtener unos ingresos dignos y proteger los sistemas alimentarios más sostenibles y diversos para el conjunto de la sociedad. En este sentido, se trabaja para recabar el apoyo del Gobierno español ya que dicha declaración sería un valioso instrumento a nivel internacional que gobiernos e instituciones deberían respetar, proteger y cumplir para evitar los abusos contra los pequeños y medianos agricultores respecto a la utilización de semillas, acaparamiento de tierras o especulación en la cadena de valor agroalimentaria.