jueves, 18 julio
miércoles, 6 agosto
Fuente lasprovincias.es / 6 agosto 2014
Valencia. Hace tan solo cuatro años que el Hotel San José abrió sus puertas en Requena, un complejo de lujo que ahora se presenta medio derruido y desmantelado. Su ruinoso estado lo ha convertido en un peligro para los vecinos de la zona, un edificio al que cualquiera puede acceder y del que han acabado por desaparecer desde las sillas y camas hasta las bañeras de hidromasaje. Tras intentar contactar con los dueños sin éxito, a través de un anuncio en el Boletín Oficial de la Provincia de Valencia (BOP) publicado el pasado mes de mayo, el ayuntamiento de la localidad ha procedido a la ejecución subsidiaria, con lo que se hará cargo de las obras con el fin, no de rehabilitar el complejo hotelero, sino de conservar en condiciones de seguridad y salubridad el mismo, tal y como establece la Ley Urbanística Valenciana.
Estas obras, cuyo valor se estima en algo menos de 35.000 euros con impuestos incluidos, consisten principalmente en tapiar los huecos de la edificación con bloques de hormigón y vallar la totalidad del complejo, para evitar de esta forma las constantes intrusiones, a pesar de los esfuerzos tanto de la Policía Local como de la Guardia Civil. Los trabajos se ponen en marcha así tras la emisión de un informe por parte del arquitecto municipal, fase previa a la ejecución subsidiaria. Desde el consistorio afirman haber intentado contactar con los actuales dueños del complejo en numerosas ocasiones, aunque ninguna de ellas con éxito. De hecho, fue tras los infructuosos intentos de notificación, cuando el ayuntamiento procedió a la publicación de un edicto en el BOP. La respuesta brilló por su ausencia.
El Hotel San José se encuentra en la actualidad en un estado de abandono que dista mucho de la ostentosa imagen que emitía hace tan solo cuatro años, cuando se inauguró. Esta situación ha propiciado, desde que cesara su actividad, constantes saqueos que lo han dejado huérfano de mobiliario, un desmantelamiento que ha llegado incluso a la maquinaría de los ascensores y al equipamiento de las cocinas. Poco queda por llevarse ya en el complejo. Pero a los contínuos robos se suma otra problemática: la inseguridad. El fácil acceso a las instalaciones ha sido la motivación principal del ayuntamiento a la hora de tomar cartas en el asunto, una situación que afecta también a los niños y jóvenes de la localidad, que se adentraban en el edificio sin ser conscientes de las consecuencias que puede tener. Y es que, lo que antes era una suite, ahora se muestra sin puertas, con las ventanas rotas y el suelo cubierto de pedazos de cristal.
Tras la confección del informe municipal, ahora es el momento del consistorio de decidir si puede acometer las obras con la brigada municipal o si, por el contrario, es necesaria la contratación externa de unos trabajos que tienen como objetivo aumentar las medidas de seguridad en el complejo, no rehabilitar el mismo.
El Hotel San José, certificado con cuatro estrellas, abrió sus puertas en 2010 convirtiéndose rápidamente en paradigma del lujo, llenando su extenso patio día sí día también con conciertos y otros eventos de postín. Con un total de 66 habitaciones, más de una veintena suites y junior suites, su apertura pretendía provocar un repunte en la actividad económica de la zona. Sin embargo, los problemas económicos no tardaron en llegar y, con ellos, el paso de la patata caliente de un dueño a otro. En estos años, el hotel ha pasado de complejo de lujo a lugar de ocio nocturno para adultos para, finalmente, acabar abandonado y desmantelado.
